El caos no es la ausencia de orden; se define como aquel estado de ciertos sistemas en los que aparecen multitud de trayectorias, eventos, sucesos, dinámicas, que son impredictibles -que no aleatorios- en su evolución.
Debido a su complejidad, los sistemas caóticos se muestran extraordinariamente sensibles a cualquier perturbación local en una parte del sistema, afectando a otras muchas.
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Causas pequeñas pueden provocar enormes efectos, por medio de avalanchas o catástrofes, que en realidad son reorganizaciones, cambios muy rápidos, producidos por el efecto acumulativo de muchas microdinamicas y disparado por la gota que colmo el vaso, como se dice en castellano.
Es la agencia colectiva e individual la que decanta el modo de reorganización y cambio, una emergencia, para el presente, que, a su vez, se integrara como contexto para el futuro.
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Algunos cambios sociales pueden entenderse como situaciones criticas que generan avalanchas como desencadenantes de procesos de reorganización local a distintos niveles, y que, no obstante, no pueden predecirse en el resultado de su evolución.
Turner denomino communitas a un estado colectivo de efervescencia social, momento de ruptura de estructuras a partir del cual muchos desarrollos son posibles. El resultado cronotopicamente determinado de toda la dinámica re-organizativa de la que estamos hablando es lo que se denomina emergencia, un fenómeno no lineal producto de la globalidad.
El cambio sociocultural puede entenderse como situaciones criticas que generan avalanchas, desencadenantes de procesos de reorganización local a distintos niveles.
El concepto de masa critica, a partir de la cual se producen acontecimientos en cadena, también tiene que ver con esta acepción. El nuevo orden implica nuevas microdinamicas, que derivaran con el tiempo en una nueva reorganización, que, en un momento determinado producirá una emergencia como orden con vida limitada.
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Los sistemas caóticos no son deterministas como otros fenómenos y procesos sistemicos que se rigen por aquellas leyes naturales que buscaban los filosos griegos, los renacentistas, los ilustrados...
Los sistemas caoticos no son lineales (...) nunca podemos conocer cuál es la situación inicial ni cuántas variables entran en acción.
No podemos rastrear la causa a partir de un efecto, y viceversa.
El cambio no se explica por multicausalidad, como un sumatorio, sino como el producto global de múltiples microdinámicas del sistema que generaran reorganizaciones y novedades, emergencias.
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Los sistemas caóticos nos rodean en nuestra vida cotidiana.
"Evolución, cultura y complejidad: la humanidad que se hace a sí misma" - Eugenia Ramírez Goicochea
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