domingo, 24 de octubre de 2010

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Nuevamente, mil gracias desde Tenerife.

Bashevis dijo...

esta presencia anónima me anima...

;)

seguiremos acercandonos.

soperos dijo...

magnífico, soberbio, espectacular, gracias!!!!

besos,
ò.

Ana Hidalgo dijo...

A través del sentido del humor y del gesto -gesto exagerado y a la vez milimétrico- se destruye la lógica del mundo. Más que rechazar, se trata de ironizar, ironizar la forma en la que cada día nos agachamos a coger nuestro sombrero o nos sentamos en la mesa a comer, plantear otras formas de sentarse a comer y coger un sombrero, formas asombrosas y que hagan reír, porque la risa crea senderos imprevisibles. En fin, genial el video.

Bashevis dijo...

Así es, reímos y lloramos, nos reconocemos. Y habrá sido así desde antiguo, los payasos sagrados tampoco rechazaban, escenificaban un descontento, ironizaban un sinfín de asimiladas situaciones, domesticados comportamientos, predisponían a algo…
Joder, vamos a reírnos, es lo único que nos queda. Reírnos de nosotros mismos hasta estallar.

SaLuz Ana!